La Vihuela Andina, creada por Mauricio Garay Cid, surge tras necesidad de concebir un instrumento representativo de nuestra cultura con las mismas posibilidades musicales que la guitarra, con una sonoridad aproximada a la del Ronroco (charango barítono), y a la de la Vihuela Renacentista, introducida en América del Sur por los españoles en el siglo XVI.